Lunchbox nº 1: Ensalada multicolor
Esta es una gran manera de aprovechar las sobras del desayuno o la cena del día anterior. En este caso, preparamos una ensalada vibrante y colorida que incluye una mezcla de vegetales como zanahorias, pimientos rojos, calabacín y tomates. Cada ingrediente aporta su propio conjunto de vitaminas y nutrientes, garantizando un almuerzo equilibrado y saludable.
Para completar esta comida, añade una porción de proteína. En este caso, utilizamos restos de pollo asado. También puedes agregar otras proteínas como queso, tofu o garbanzos, según tus preferencias.
Finalmente, adereza la ensalada con vinagreta casera y guarda la mezcla en un recipiente hermético. Preparar esta comida saludable y atractiva es fácil y te dejará lleno y satisfecho.
Lunchbox nº 2: Bocadillos mixtos de sobras
Aquí tienes un enfoque diferente para el almuerzo. En lugar de una sola comida, esta propuesta se basa en una variedad de bocadillos pequeños y saludables.
Esta lonchera contiene sobras de pasta integral mezclada con salsa de tomate casera y verduras frescas picadas. También hemos incluido algunos ingredientes adicionales para mantener las cosas interesantes: trozos de queso, un puñado de nueces para un aporte extra de proteínas, y algunas uvas rojas para un dulce final.
Estos bocadillos son fáciles de comer y te proporcionan la energía que necesitas para afrontar el resto del día. De esta manera, puedes disfrutar de un almuerzo equilibrado y variado todos los días.
Comidas para llevar saludables
En resumen, preparar tus comidas para llevar saludables y deliciosas no tiene por qué ser un desafío. Aprovecha las sobras de la forma más creativa y colorida posible. Estos son solo dos ejemplos de cómo puedes hacer que tu almuerzo sea más emocionante y nutritivo. Encuentra los ingredientes y combinaciones que más te gusten y siente la diferencia en tu estado de ánimo y energía durante el resto del día.